El guitarrista Nicolás Alvarado, acompañado por el Ensamble de Cámara Baobab, sumergió al público del Teatro Nacional dentro de las aventuras del Principito, la novela más afamada de Antoine de Saint-Exupéry y el segundo libro más vendido en el mundo.

Con 16 de melodías cortas y proyecciones audiovisuales, los espectadores del espacio Teatro al Mediodía revivieron el pasado 7 de mayo esta inolvidable historia con la narración musical titulada “El Principito: Una aventura en seis cuerdas”, presentada en el marco de la conmemoración de los 70 años de la creación del libro.

“Hasta donde yo sé una obra musical sobre El Principito no existe. Hay una ópera, hay por ahí unas canciones (…) pero en el género instrumental no”, explica Alonso Torres, director y compositor de la pieza musical.

El zorro, la flor y la serpiente, son algunos de los personajes ilustrados en este viaje a través de planetas y asteroides, en donde la imaginación y las sensaciones son los protagonistas.

Por otra parte, según Alvarado, el hecho de que este espectáculo sea una obra instrumental y no una obra de teatro, un musical o una ópera “da más chance de que la gente se identifique desde más adentro. Uno no le dice a la persona lo que está pasando, sino que la persona se lo tiene que imaginar”, expresó Alvarado. “Obliga al público a que ellos construyan en el relato como ellos quieren”, añadió el guitarrista.

La propuesta “fue saliendo primero en bromas entre Nicolás y yo, y de pronto esas bromas nos las empezamos a tomar en serio”, comentó Torres. Decidieron llevar a cabo el proyecto para la graduación del bachillerato en guitarra de Alvarado (2007), que estaba próxima en aquel momento.

Nicolás Alvarado se egresó, en el 2010, con honores de la Licenciatura en Artes Musicales con énfasis en guitarra de la Universidad de Costa Rica. Tanto Alonso Torres como los músicos del Ensamble, son egresados o estudiantes de la Escuela de Artes Musicales.

El Ensamble de Cámara Baobab fue creado exclusivamente para esta obra, pensando en “cuáles instrumentos podrían ampliar la sonoridad de la guitarra, pero siempre en concordancia con cómo la guitarra suena”, señaló el compositor. Dicho ensamble incluye violines, viola, violoncello, fagot, clarinete, oboe y arpa.

Tanto Alvarado como Torres afirman que obra ha tenido gran aceptación por parte del público. Esto se confirmó en la muestra del Teatro Nacional, donde al final de los 30 minutos de espectáculo la audiencia aplaudió entusiasmada a los intérpretes.

Este evento musical se ha presentado desde hace seis años en diferentes escenarios dentro y fuera del país, destacándose su participación en el II Festival de Guitarra de San José (2009) y el II Festival de Compositores a la Guitarra Pa’ lo Escrito de la Universidad Autónoma de México (2009).

Para ambos (guitarrista y compositor) el Teatro Nacional es el mejor espacio del país, por ello tocar en este importante escenario es un logro personal alcanzado.

Fotografías: Alejandro Olarte