Programa de Educación Abierta: una oportunidad para volver a creer
Los contenidos del curso también son nutridos con conferencias y foros desarrollados dentro de la universidad que se relacionan con los temas de la clase, la idea gira en torno a no pensar el salón de clase como el único lugar donde se aprende, sino que el aprendizaje está en todas partes y la UCR tiene cientos de lugares donde el estudiantado del PEA es bienvenido. Foto: Cortesía PEA
En una pequeña esquina, al costado noroeste del Edificio Saprissa, en San Pedro de Montes de Oca, está ubicado el Programa de Educación Continua (PEA), un espacio creado en el 2006 para el mejoramiento académico del personal de la Universidad de Costa Rica (UCR).
El programa surgió de una solicitud de funcionarios y funcionarias para que se abriera un espacio donde pudieran iniciar, continuar o concluir sus estudios de educación secundaria. La primera matrícula fue en el 2006 con 125 estudiantes y desde entonces, el PEA no ha dejado de crecer.
En este 2016, hay 235 estudiantes matriculados que por diversas razones tuvieron que abandonar sus estudios o nunca pudieron iniciarlos, el PEA no sólo les ofrece la oportunidad de mejorar su nivel de escolaridad, también, les brinda un espacio de construcción colectiva y participativa del conocimiento.
“En algún momento se dijo que la UCR no debía hacerse cargo de esta población, pero nosotros nos sostuvimos siempre en la idea de dar acceso a culminar la educación general básica a personas que nunca lograron hacerlo y que lo olvidaron, porque creen que ya ellos o ellas no pueden estudiar. El PEA ofrece esa posibilidad mediante un trabajo interinstitucional, es un ejemplo claro del objetivo primordial de la Acción Social de la UCR”, expresó la M.Sc. Sonia Solís Umaña.
El pasado martes 15 de noviembre se desarrolló la graduación 2016, con 35 estudiantes que lograron su bachillerato. Fue el acto de graduación número 11 en la historia del PEA.
“Siempre anhele lograr lo que hoy estoy logrando, no tuve la oportunidad de hacerlo y ahora me lo propuse y sí pude, acá estoy con mi título de bachillerato, el PEA y su equipo han sido un verdadero regalo para nosotros”, expresó Ginés Vargas Quirós, de 51 años.
En el PEA los jóvenes también tienen la oportunidad de culminar sus sueños, José Alonso Sánchez Vargas, de 28 años también recibió su título y recordó que nunca es tarde para reacomodar la vida: “Desde que entré al programa me propuse pasar toda materia matriculada, con la ayuda del equipo del PEA pude llegar a este logro. El PEA es una gran oportunidad para personas como nosotros que por una u otra razón hemos dejado los estudios, el PEA es un espacio para volver a creer”.
El PEA continúa su labor y para el 2017 tendrá nueva coordinación pues la M.Sc. Sonia Solís Umaña, está próxima a su jubilación. Solís es una de las personas que forjaron las bases del programa, le dio forma y construyó junto a su equipo una casa de sueños. A sus 65 años, ha llegado el momento de retirarse, pero ella no deja de recordar su principal aprendizaje, ese que comienza con que “la educación es una aventura”.
Hay dos componentes primordiales en el proceso educativo que ofrece el programa, primero, las lecciones presenciales y segundo, actividades complementarias que nutren el análisis de los contenidos vistos en clase, por lo general son giras educativas a lugares que se relacionan con los temas de cada materia, se trata de aprender a construir nuevas ideas, más que repetir las ya existentes.
Actualmente, se trabaja por replicar opciones de estudio como el PEA en las sedes de Occidente, Golfito y Puntarenas.
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