Desde el año 2016 la comunidad de San Pablo de Heredia, en conjunto con el proyecto de Acción Social de la Universidad de Costa Rica (UCR) Construyendo juntos: Personas con discapacidad en el ejercicio efectivo de los derechos humanos (ED-3297) ha trabajado por asesorar, mediante actividades de capacitación y seguimiento, a líderes y lideresas de organizaciones de personas con discapacidad, para que puedan desarrollar herramientas, estrategias, competencias y actitudes que les permita ejercer una participación ciudadana activa y plena en el plano cantonal y comunal por medio de la iniciativa San Pablo Inclusivo y Accesible. 

San Pablo Inclusivo y Accesible es un proyecto de la municipalidad del cantón que nace en respuesta a la condición de desigualdad, discriminación y exclusión social a la que se enfrentan las personas con discapacidad y sus familias. La iniciativa trabaja por conocer los mecanismos que permiten hacer cumplir con las obligaciones del Estado y la sociedad pactadas en distintos instrumentos jurídicos a nivel nacional e internacional. 

“En las municipalidades cuando se habla de accesibilidad en lo que se piensa es en aceras y que ya con eso se cumplió, lo que no han entendido es que la accesibilidad es muy amplia y lo que necesitamos es más inclusión. Ya tenemos muchas leyes y recursos donde acudir para hacerlas valer, pero no sabemos cómo hacerlos valer y eso solo se logra empoderando a la población, que es lo que hemos estado haciendo aquí en San Pablo”, expresó David Zúñiga Arce, Exvicealcalde de la Municipalidad de San Pablo.

El proyecto universitario Construyendo Juntos ha realizado su aporte a la comunidad por medio de la capacitación en materia de derechos y del acompañamiento en la búsqueda de personas u organizaciones que les apoyen a concretar sus ideas y a transformarlas en proyectos viables de ser gestionados y ejecutados. 

“En el caso de las personas con discapacidad, el ejercicio efectivo de los derechos humanos pasa por vencer situaciones de discriminación, de exclusión, de marginación del resto de la sociedad. Es por eso que aquí queremos, a través de proyectos que sean viables de ser desarrollados a nivel comunal, que ellos vayan venciendo estos obstáculos”, indicó Erick Hess Araya, coordinador del proyecto.

Durante el trabajo en comunidad, se han realizado talleres con amplia participación de personas con discapacidad y de familiares, personas interesadas de la comunidad y funcionarios institucionales, para conocer sobre la Convención de los Derechos de Personas con Discapacidad (ONU, 2007), sobre el marco normativo nacional que contesta a la Convención y para compartir las expectativas y aspiraciones para la participación inclusiva de las personas con discapacidad interesadas en el desarrollo local. 

“Estos talleres me ayudan mucho para poder velar por los derechos de mi hijo porque, como  madre, la principal conocedora de estos debo ser yo para transmitir estos mensajes ya sea al Ministerio de Educación, a la Caja o a quien sea. Día con día a las personas con discapacidad se les violentan sus derechos y muchas veces creen que con tenerlos en un aula ya están integrados, pero queremos que ellos sean lo más autónomos posible y que se cumpla la parte que dice que la educación debe adaptarse a las necesidades de cada persona y no la persona adaptarse a la educación”, expresó Paola Vega Mena, participante de los talleres.

Este proyecto de Acción Social pretende continuar su labor alrededor de tres contenidos esenciales: habilidades blandas, gestión pública local y formulación de proyectos, así como seguir estableciendo vínculos formales con organizaciones de personas con discapacidad vinculados a experiencias inclusivas desde los gobiernos locales.