“Vine hoy aquí porque me llamaron el viernes para una terapia física que tenía pendiente. Tuve un accidente hace dos años y siete meses por lo cual necesitaba una terapia. Son cuatro días que me toca hacer terapia, pero para ser el primer día, me siento muy bien. Espero en Dios que esta actividad se siga dando, ya que en los hospitales hay muchas personas esperando este tipo de actividad porque realmente [las consultas] están muy saturadas” indicó Jiber Cascante, vecino de Nicoya.

Al igual que don Jiber, personas nicoyanas de todas las edades fueron atendidos por el equipo de estudiantes y profesionales que conforman el proyecto “Salud sin Paredes”, de la Vicerrectoría de Acción Social, que se desplazó hasta el cantón guanacasteco del 15 al 20 de julio, en el marco del Festival del Bienestar.

“Para todo el equipo -que se conforma de más de 150 personas-, de Salud sin Paredes, es un placer estar en este Festival del Bienestar. Hemos ofrecido una gama amplia de servicios gratuitos para toda esta comunidad enfocado en necesidades que las instituciones de esta zona nos han indicado” comentó el Dr. Jean Carlo Segura, médico y docente de la UCR.

El Festival, cuyo objetivo fue llevar salud, arte, deporte y cultura a la población, se llevó a cabo gracias al trabajo conjunto de la Universidad de Costa Rica (UCR), la Municipalidad de Nicoya, la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) y el Ministerio de Salud. 

Silvia Gutiérrez, vicealcaldesa de Nicoya, comentó que “estamos muy felices de tener el Festival del Bienestar en la semana previa a la celebración de los 200 años de la Anexión de Nicoya a Costa Rica. Tenemos la unión de un montón de instituciones que han permitido que este festival y sobre todo Salud sin Paredes, continúe en Nicoya”. 

Según el Índice de Progreso Social Cantonal 2024, Nicoya es uno de los cantones con más bajo desempeño en cuanto a progreso social (aquel que se basa en aspectos sociales y ambientales), mientras que el Atlas de Desarrollo Humano Cantonal lo ubica en el puesto 29 de los cantones con los menores índices de desarrollo humano de Costa Rica.  

Es por ello que para Maricela Villegas, Directora del Área Rectora del Ministerio de Salud de Nicoya es tan relevante el desarrollo de estas iniciativas.  “El cantón de Nicoya cuenta con algunas deficiencias para darle a la población la parte de [atención] en salud, sobre todo especialistas, que nos hacen falta (...) necesitamos mejor infraestructura. Esta alianza con la Universidad y las instituciones del cantón mejora mucho la calidad [de vida] de la población; acuden personas que vienen de lugares muy lejanos, a los cuales no les podemos brindar la consulta diaria porque no existen quizá EBAIS locales donde ellos puedan acudir”.

En esta ocasión, el convenio entre las instituciones para la atención de pacientes se enfocó, casi en su totalidad, en la reducción de las listas de espera y con ello, se colaboró en el descongestionamiento en los centros de salud. 

“Con el convenio que hemos hecho, incluso con recetas y referencias directas a primero, segundo y tercer nivel de atención de la zona de Nicoya, en cooperación con el director del Hospital de La Anexión y la directora del Área de Salud de Nicoya podemos disminuir listas de espera de distintos sectores más afectados” mencionó el Dr. José Alvarado, médico general y docente en la UCR.

Por ejemplo, la UCR llevó a cabo procedimientos como papanicolaou y las muestras se llevaron de inmediato al Hospital La Anexión para ser analizadas e incluidas en los expedientes personales de las pacientes.

Sussy Parkinson fue una de las personas beneficiadas con este exámen ginecológico. “Me facilitó bastante este servicio ya que yo estaba esperando por medio de la Caja varios meses para mi cita, que está para octubre y ahora ya me la adelantaron y ¡qué dicha! ¡me alegro bastante! Buen servicio, buenos estudiantes. Esperemos ver más [actividades como esta] en otros lugares remotos, rurales, acá en Guanacaste y en todo Costa Rica”.

Anteriormente la UCR llevó ferias de salud comunitaria a otros dos cantones con bajo índice de desarrollo, en febrero Salud sin Paredes estubo en San Vito de Coto Brus y en mayo fue el turno de Bataan de Matina. 

“Salud sin Paredes ha significado un impacto bastante relevante en el tema de salud a lo largo del país, ya con esta tercera edición que se desarrolla (...) el apoyo rápido, efectivo, pero sobre todo humanitario genera satisfacción en las personas. Este tipo de iniciativas que permiten que la comunidad se acerque -no solo gente que está cerca del lugar donde estamos, sino que vienen de lugares alejados para ser atendidos-, genera mucho beneficio a nivel de salud en la comunidad” indicó Alejandra Tenorio, docente y proyectista de la Sede del Caribe.

Estudiantes en contacto con las comunidades

El médico José Alvarado, quien acompañó a muchos estudiantes en las consultas y procedimientos realizados en Nicoya, considera que una de las partes más importantes de esta iniciativa es integrar a los estudiantes con las comunidades. “Los estudiantes de medicina están acostumbrados a estar en el Gran Área Metropolitana, en los hospitales centrales, donde a veces hay muchísimos más recursos y para nosotros es de suma importancia que ellos se integren y vean lo que es la medicina comunitaria, lo que es medicina en lugares como un polideportivo, porque uno puede hacer medicina no solo en el hospital, no solo en la clínica, no solo en el EBAIS, sino en cualquier lugar donde haya un profesional de salud, gente apasionada y gente que le guste ayudar y obviamente el apoyo de distintas instituciones que permitan toda esta integración”.

Daniel Meléndez, estudiante de Microbiología que participó en este Festival del Bienestar consideró que esta es una oportunidad valiosa para compartir conocimientos. “Hemos tenido la oportunidad de atender a bastantes personas que se han acercado, hemos podido interactuar con ellos y podemos ver el lado humano de lo que estamos aprendiendo. No es solamente tener información, sino tener una razón por la cual se hacen las cosas. Además me parece que es muy valioso poder interactuar con otras personas que se van a desempeñar en otras áreas (...) y cuando estemos en un trabajo poder juntos ayudar a estos mismos pacientes, que son aquellos a los que nos debemos”.

De tal manera que en este caso, la relación forjada entre las comunidades, las instituciones y la Universidad ha sido ventajosa para todas las partes. Las comunidades reciben acceso gratuito a los servicios; las instituciones agilizan las listas de espera y los docentes y estudiantes universitarios se nutren de saberes y experiencias que solamente pueden obtener en la práctica.

Así lo manifestó Victoria Avellán, oficial de policía pensionada y quien tuvo acceso a una cirugía menor. “Me cauterizaron una partecita de las que me estaba afectando mucho en la mano. Gracias a Dios he sentido muy buena atención, los estudiantes han sido muy diligentes, muy atentos, muy simpáticos todos los que están en este proceso. Sigan adelante con sus proyectos y ojalá puedan salir con ese título en sus manos (...) verlos a ustedes en esta carrera, me goza, y los felicito”.

Bienestar es salud integral

Además de la atención de pacientes en más de 15 servicios de salud gratuitos y humanizados, el Festival del Bienestar incluyó actividades artísticas, deportivas y culturales, como parte del enfoque en salud integral. Por ejemplo, los proyectos de Trabajo Comunal Universitario y Educación Permanente, que forman parte del conglomerado Acción Social Medicina, se movilizaron a colegios cercanos al polideportivo para llevar información sobre distintas enfermedades y prevención de parasitosis.

El deporte, la actividad física y la recreación estuvo a cargo del equipo de UCR Te Mueve, quienes pusieron a la gente a jugar, bailar y moverse tanto en las instalaciones del polideportivo como en los colegios.

La música también formó parte de la actividad. Se ofrecieron conciertos gratuitos en el Parque de Nicoya, los días 17, 18 y 19 de julio; ni siquiera las lluvias que quedaron para la noche impidieron a los asistentes bailar y disfrutar de las presentaciones.

La literatura no quedó por fuera. Varias presentaciones de libros se llevaron a cabo en el Campus Nicoya de la Universidad Nacional (UNA), todos relacionados con la cultura e identidad de la zona y finalmente, el viernes 19 se entregó un nuevo rinconcito de lectura a la Escuela Arturo Solano Monge en Río Grande de Nicoya: un espacio acogedor y con una selección de libros para el aprovechamiento de los niños y las niñas que estudian en este centro educativo.

Durante este 2024, la UCR continuará gestionando esfuerzos para realizar ferias de salud comunitaria en otros lugares con bajo índice de desarrollo humano.